Home

Noticias

Artículo

Obama tiene buenas noticias económicas

14 de abril de 2009

WASHINGTON  — El presidente Barack Obama intenta formular un cuidadoso equilibrio entre los avances económicos de su gobierno y los desafíos persistentes para combatir una recesión que heredó de su predecesor pero que es ahora enteramente suya.

El presidente pronuncia el martes más tarde un discurso económico en la Universidad de Georgetown, cuando su gobierno se acerca a los simbólicos 100 días de gestión. Sus ayudantes han calificado el discurso como un informe importante de su gestión, aunque anticiparon que no tendrá anuncios sorprendentes.

En lugar de ello, insistieron, el discurso enmarcará el estado de la economía cuando Obama llegó a la Casa Blanca el 20 de enero, los pasos adoptados por su gobierno en los primeros tres meses y lo que será necesario hacer para enderezar los sectores en apuros, incluyendo el de la vivienda, el bancario y el financiero.

"El presidente desea utilizar la oportunidad para mantener informado al público estadounidense sobre la situación presente, lo que queda por hacer y describir las medidas adoptadas para ayudar a la recuperación económica", dijo el secretario de prensa de la Casa Blanca Robert Gibbs.

Aunque Obama resaltará con lujo de detalles los avances logrados, dijo Gibbs, "creo que el presidente comprende al mismo tiempo que pese a ciertas estadísticas prometedoras, ya sea en el sector de la vivienda o otros parecidos, nos quedan muchos, muchos meses de desempleo, en los que centenares de miles de personas pierden sus puestos de trabajo".

El desempleo alcanzó su mayor nivel en 25 años en marzo con el 8,5% de la fuerza laboral, muchas personas siguen perdiendo sus puestos de trabajo y sus viviendas, o temen perderlas. Empero, hubo una merma en el número de estadounidenses sin trabajo que solicitaron beneficios por seguro de desempleo y los pronósticos de sólidas ventas en abril de varios minoristas.

Los inversionistas bursátiles, consumidores y los compradores de viviendas parecen menos nerviosos, mientras que los otrora congelados mercados crediticios han comenzado a recuperarse lentamente y los indicadores económicos más preocupantes parecen haberse estabilizados.

 

(AP)