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Más compromisos para el Gobierno con perdedores en TLC

Se fortalecerán a sectores como el avícola y el arrocero en temas como mejoramiento sanitario, modernización y búsqueda de nuevos mercados.

3/3/06
1 de marzo de 2006

El Gobierno sigue adquiriendo obligaciones para proteger a los sectores menos beneficiados con el tratado de libre comercio (TLC) que se cerró con EE.UU.. Ahora, el ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Andrés Felipe Arias, dijo que fortalecerán a sectores como el avícola y el arrocero en temas como mejoramiento sanitario, modernización y búsqueda de nuevos mercados.

Arias estuvo reunido con las juntas directivas de la Federación Nacional de Avicultores (Fenavi) y con la Federación Nacional de Arroceros, en la que se buscaron soluciones.

El Gobierno se comprometió a sacar adelante un documento sanitario del Consejo Nacional de Política Económica y Social (Conpes), para fortalecer la protección del sector avícola contra enfermedades como la influenza aviar, a abrir mercados externos diferentes al de EE UU y a destinar recursos del programa "Agricultura ingreso seguro" (AIS).

El programa AIS busca canalizar un esfuerzo fiscal que asciende a unos $500.000 millones para los sectores agropecuarios menos favorecidos en el TLC. La idea es convertir ese apoyo en una política permanente y de Estado mediante una ley que se presentará al Congreso antes o simultánea con la firma del tratado.

"Hemos acordado un manejo profundo sanitario para ser más competitivos con los otros mercados y proteger la sanidad animal del país. Los esfuerzos que se requieren son de mejoramiento tecnológico y modernización de la infraestructura", dijo Arias.

El ministro afirmó que hay amenazas de la Comunidad Andina de Naciones (CAN) que ha generado un impacto negativo fuerte y ha invitado a los arroceros a trabajar para evitar que el efecto se profundice.

Para los arroceros que opten por la alternativa de buscar la reconversión a otro sector, el Gobierno les dará la posibilidad de acceder a una línea de crédito blanda de siete años de plazo, con tres de gracia y tasa de interés equivalente a la DTF menos 2. Los agricultores tienen hasta el quinto año del programa para tomar la decisión.