Home

Noticias

Artículo

Lula parte a gira por Chile y Argentina

El mandatario partió el miércoles rumbo a una rápida gira de dos días a Chile y Argentina y en la que discutiría desde temas bilaterales hasta sus diferencias con el mandatario venezolano Hugo Chávez, según estimaciones periodísticas y de analistas .

26 de abril de 2007

Brasilia.-  Lula partió rumbo a Santiago a las 18.22 hora local (2222GMT), donde hará una visita oficial el jueves cuando se encuentre con su colega Michelle Bachelet para la firma de al menos una docena de acuerdos, entre ellos uno sobre los biocombustibles.

En Santiago, Lula también asistirá al cierre del Foro Económico y visitará la sede de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la FAO, según la cancillería brasileña. Viaja acompañado de una delegación de siete ministros.

Lula acudió en 2006 al juramento de Bachelet, quien entre sus primeros viajes oficiales realizó uno a Brasilia en abril de aquel año, ambos dirigentes destacaron entonces que las relaciones de ambos países eran estratégicas y que los puntos de coincidencia iban desde lo económico hasta lo internacional.

De Santiago, el gobernante partirá el jueves tarde rumbo a Buenos Aires para una cita de trabajo el viernes con su colega Néstor Kirchner.

En Argentina, Lula sólo estará acompañado de su canciller Celso Amorim y no está prevista la firma de ningún acuerdo, sino una reunión privada de trabajo de los dos mandatario en la residencia oficial de Olivos. Los dos países resolvieron la mayoría de sus convenios bilaterales pendientes en una cumbre realizada en Iguazú, en noviembre del 2005.

"Yo entiendo ese viaje de Lula como un contrapeso político al avance de (el mandatario venezolano Hugo) Chávez...una especie de contraofensiva diplomática", dijo en conversación telefónica Flavio Sombra, profesor del Instituto de Estudios Políticos de la Universidad de Brasilia. "Brasil y Venezuela tienen proyectos diferentes...y el proyecto de Brasil está más cerca de Chile y Argentina", agregó.

Una muestra de esa cercanía es que Santiago y Brasilia tienen reservas sobre el proyecto impulsado por Caracas de crear un llamado Banco del Sur, que se alimente con las reservas internacionales de los países de la región y los ayude en caso de un problema económico interno.

Y aunque Argentina respalda el proyecto del banco, ha mostrado también sus reservas sobre crear una llamada OPEP del Gas, también iniciativa del presidente Chávez.

Los roces de Brasilia y Caracas, aparentemente resueltos en la reciente cumbre energética sudamericana realizada en Venezuela, fueron a partir de una acuerdo firmado entre Brasil y Estados Unidos para promover el uso hemisférico del etanol, o el combustible producido aquí a partir de la caña de azúcar.

 

 

AP