Gaviria reclama a EE.UU. un debate "serio y amplio" para combatir las drogas

Nueva York - "Latinoamérica tiene derecho a exigir a EE.UU. que adopte políticas más eficaces para reducir el consumo", afirmó Gaviria en declaraciones a la prensa tras participar en la presentación en Nueva York de una iniciativa global para proponer alternativas diferentes a la prohibición de las drogas.

Según Gaviria, EE.UU. se resiste a abrir el debate porque no distingue entre consumidores y traficantes.

"Si se parte de la idea de que cualquier consumo es un delito y un crimen, es muy difícil encontrar alternativas", añadió.

De la misma idea es el expresidente de Brasil Fernando Henrique Cardoso (1995-2003), quien aseguró también a la prensa que EE.UU. debe reflexionar sobre la efectividad de considerar delincuentes a todos los consumidores.

Por su parte, Gaviria, que fue presidente de Colombia entre 1990 y 1994, insistió en pedir a Washington que adopte medidas para reducir la violencia y el mercado clandestino de las drogas, pues consideró que "no se trata solo de ver cuánta gente termina en la cárcel por drogas o cuántos alijos se incautan al año".

Para el exmandatario colombiano el problema en Estados Unidos es que ese país "gasta mal sus recursos". De los 40.000 millones de dólares que EE.UU. invierte al año para hacer frente al narcotráfico, lamentó que sólo una pequeña parte, "entre el 10 y el 15 por ciento", se destinan a educación, prevención y tratamientos.

También criticó que el tramite judicial por cada persona encarcelada en EE.UU. por drogas cueste a las arcas públicas 450.000 dólares, por lo que consideró que "tener tantos consumidores en prisión que no suponen un peligro no parece una buena política".

Reconoció que luchar contra el blanqueo de dinero es parte esencial de la receta para acabar con el narcotráfico e insistió en que eso no sustituye el problema de qué hacer con los consumidores.

Preguntado por la guerra contra el narcotráfico en México, el expresidente Gaviria dijo tener "gran confianza" en que el país podrá controlar su problema de seguridad "en los años por venir".

Advirtió de que el principal problema para México es que el flujo de drogas continuará mientras los niveles de consumo sigan tan altos en EE.UU..

EFE