Entregado aeropuerto de Bogotá a concesionario Opaín

Bogotá.- Con la entrega hoy de las instalaciones del aeropuerto internacional ElDorado, de Bogotá, al consorcio Opaín que ganó la concesión del terminal aéreo durante 20 años, comenzó una nueva etapa en la historia del principal aeropuerto del país.

El concesionario Opaín tendrá la responsabilidad de administrarlo durante los próximos veinte años y así mismo asumirá el desarrollo del Plan Maestro que define la modernización y expansión del terminal aéreo y emprenderá obras que en conjunto tienen un costo estimado en 650 millones de dólares.

Acciones:
- La ampliación de la capacidad para atender los requerimientos de tráfico actuales y futuros en el Aeródromo capitalino.

- El mantenimiento de las tarifas y cargos a los usuarios en unos niveles razonables.

- Responder a las necesidades de competitividad de la región, advirtiendo circunstancias inmediatas como el tratado de libre comercio y las diversas variables que los mercados proyecten.

Las obras que se incluyen en el contrato de concesión firmado entre la Aerocivil y el consorcio Opain deben iniciarse durante el segundo semestre de este año, luego de cubierto el llamado cierre financiero dentro del cual se cuantificará definitivamente y aprobarán las inversiones a ejecutar.

Las principales obras de modernización y expansión del Aeropuerto son las siguientes:

- Construcción de un nuevo terminal de pasajeros, que atenderá las operaciones internacionales.

- Total remodelación de la terminal de pasajeros existente, la cual se destinará a operaciones nacionales.

- Construcción de nuevas terminales de carga.

- Construcción de nuevas vías de acceso en los predios del aeropuerto, incluyendo conexión con el sistema de transporte masivo Transmilenio.

- Nuevo edificio administrativo de Aerocivil.

- Nuevo edificio para agencias del Gobierno que tengan competencia en el manejo de carga.

- En síntesis lo que se busca es convertir el aeropuerto El Dorado en el centro de conexiones más importante de Suramérica.

El funcionario dijo que el traspaso de la administración y operación del aeropuerto se produce luego de un trámite regular que significó modificar la planta de personal que soportaba la operación, el enganche de algunos funcionarios por parte del concesionario y la reubicación de otros en la Aeronáutica Civil, lo cual se cumplió sin el menor traumatismo y por el contrario garantizando la estabilidad de quienes se mantienen en la nómina de la Entidad.

El concesionario Opain, por su parte, asume la operación del aeropuerto garantizando integralmente la prestación de los servicios a los usuarios nacionales y extranjeros, interpretando con ello la pretensión de mejorar los estándares de esos servicios. De acuerdo con la manera como se ha venido ejecutando el empalme, no deberá producirse ningún inconveniente y los viajeros pueden tener la seguridad de obtener un servicio acorde con sus exigencias.

Tampoco durante el desarrollo de las obras de modernización y expansión del aeropuerto se experimentarán mayores dificultades, pues se programarán diversas fases o etapas con el ánimo de minimizar los obstáculos naturales que una construcción de las características de la definida para el aeropuerto imponen, según lo proyectado por el concesionario. “Los usuarios percibirán la menor incomodidad posible y al cabo de cinco años tendremos el mejor aeropuerto de la región, como es la pretensión del Gobierno Nacional”, indicó Sanclemente Alzate.

Durante los próximos cinco meses la Aeronáutica Civil analizará y evaluará los diseños de las obras que ha planteado el concesionario y definirá si las aprueba o bien mantiene los prediseños que ya se han hecho por parte del ente estructurador, frente a lo cual ya se han surtido los primeros contactos. El Ministerio de Transporte y la Aeronáutica Civil confían en el desarrollo exitoso de este proceso de modernización y expansión a través del contrato de concesión porque permitirá al país contar con un aeropuerto que responda a los compromisos de globalización enmarcados en iniciativas como el tratado de libre comercio y demás responsabilidades del país, señaló Sanclemente.