Home

Noticias

Artículo

El crudo desaparece del Golfo, pero el turismo sigue atascado

Se limpió el crudo de las costas, la fuga de petróleo se tapó y algunas ciudades ni siquiera fueron afectadas, pero el temor de encontrarse con playas contaminadas de manchas negras mantiene alejados a los turistas de la costa estadounidense del Golfo de México.

23 de agosto de 2010

Misisipí.- La percepción de que las costas están repletas de crudo podría tardar años en superarse y costarle a la región miles de millones de dólares, según funcionarios.

En un gran porche que alguna vez fue parte de la propiedad del personaje histórico Jefferson Davis, presidente de la Confederación, dos mujeres sentadas en mecedoras escuchaban las cigarras, mientras esperaban que comenzara un recorrido por la casa.

Antes del huracán Katrina, unas 200 personas venían cada día a visitar el lugar, la única estructura en el terreno que no fue destruida por la tormenta. Era suficiente para cubrir los gastos, pero el turismo ha decaído en un 20%, hasta el punto que sólo se acercan unos cuantos visitantes cada día, desde que explotó la plataforma operada por BP PLC en el Golfo de México.

A lo largo de la costa del Golfo se vive una situación similar.

A medida que se acerca el fin de la temporada alta del turismo, con un fin de semana largo por el día del trabajo en Estados Unidos a principios de septiembre, los locales y hoteles están haciendo malabares para subsistir y permanecer en la zona, Unos 400.000 empleos dependen del turismo.

Algunos negocios están ofreciendo descuentos, conciertos especiales y hasta prepararon comerciales con celebridades para invitar a los lugareños a que visitan sitios que en el pasado eran vistos como destinos para turistas foráneos.

BP le otorgó millones a la región para que promueva el turismo: US$25 millones a la Florida y US$15 millones por estado para Luisiana, Misisipí y Alabama, pero la mayoría de los fondos han sido gastados sin que se observen grandes resultados.

"Una vez que se crea una percepción, lleva mucho tiempo cambiarla", dijo Geoff Freeman, vicepresidente ejecutivo de la Asociación de Viajes de Estados Unidos, una organización nacional sin fines de lucro.

"Uno de los mejores ejemplos ocurrió luego de Katrina. Es 2010 y apenas estábamos llegando a los niveles de 2005", agregó.

Un estudio que la asociación comisionó al grupo Oxfor Economics proyecta que el costo del desastre en la región sería de 22.700 millones de dólares para 2013. Tomando en cuenta los US$500 millones donados por BP para promover el turismo, calculan que esa cifra se podría reducir a US$15.200 millones.

El grupo también informó que los viajes a la zona no recuperarán su nivel hasta al menos 2013.

 

AP