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Colombia mantendrá discreción frente a Venezuela

El canciller Fernando Araújo afirmó el martes que Bogotá mantendrá su política de "prudencia" y "discreción" para tratar el tema de las relaciones con Venezuela, golpeadas tras duros ataques entre los mandatarios de ambos países.

11 de diciembre de 2007

Bogotá.- En el "gobierno nacional hemos tomado una línea política que es mantener mucha discreción, mucha prudencia en el tema de Venezuela y yo me conservo en esa línea", dijo el canciller a la emisora Caracol desde Buenos Aires, donde asistió la víspera a la asunción a la presidencia argentina de Cristina Fernández

Araújo dijo que ha intentado en varias ocasiones comunicarse con su colega venezolano Nicolás Maduro, pero sin éxito.

"Lo llamé varias oportunidades, no pude hablar con él, voy a seguir en ese intento", dijo.

El canciller colombiano declinó comentar las últimas afirmaciones del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, también desde Argentina, asegurando que ha perdido la confianza que tenía en Uribe y que las relaciones comerciales entre los dos países van a sufrir porque sustituirá importaciones que hacía su país a Colombia por productos de otras naciones, como Brasil.

Chávez anunció el 25 de noviembre que colocaba las relaciones con Colombia "en el congelador", pero que no sería él quien rompiera los lazos diplomáticos con un país con el que comparte 2.219 kilómetros de frontera. Venezuela, además, llamó a su embajador a consultas, gesto que no fue seguido por Colombia.

Uribe replicó horas después del anuncio del dirigente venezolano criticando lo que calificó de "proyecto expansionista" de Chávez, a quien dijo que no estaba interesado en la paz colombiana, sino en que "Colombia sea víctima de un gobierno terrorista de las FARC".

A pesar de los anuncios aún los sectores privados de los dos países no han informado de una reducción de la corriente comercial de unos 5.000 millones de dólares.

El cruce de reclamos se produjo a raíz de la decisión de Bogotá el 21 de noviembre de poner fin a la mediación de Chávez ante las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), para lograr el canje de secuestrados en manos de los rebeldes a cambio de guerrilleros en prisión. Chávez dijo que esa suspensión fue un "escupitajo en la cara" y que Colombia merecía "un mejor presidente, por lo menos más digno".

 

 

AP