Home

Noticias

Artículo

Bancos centrales vuelven a inyectar dinero en mercados tensos

24 de septiembre de 2008

WASHINGTON/SIDNEY - La Reserva Federal de Estados Unidos actuó el miércoles por segunda vez en 24 horas para mantener el funcionamiento del mundo financiero, esta vez con medidas coordinadas junto con Australia y Escandinavia para inyectar 30.000 millones de dólares en el mercado de dinero.

El Banco Central Europeo (BCE), el Banco de Inglaterra, el Banco de Japón (BJ) y el banco central australiano también volvieron a aportar miles de millones de dólares en sus propios sistemas bancarios para contrarrestar el atesoramiento de dinero de parte de las entidades financieras.

La Fed estableció más "swaps" (acuerdos de intercambio recíproco) cambiarios con los bancos centrales de Australia, Dinamarca, Noruega y Suecia, un nuevo esfuerzo para atenuar las tensiones de los mercados globales de crédito.

En materia de swaps cambiarios con otros grandes bancos centrales, la Fed ya había comprometido 247.000 millones de dólares antes del último anuncio.

"Estas facilidades, como aquellas que ya están en vigencia con otros bancos centrales, están diseñadas para mejorar las condiciones de liquidez en los mercados financieros globales", dijo la Fed.

Alguna vez sinónimo de seguridad y liquidez, el mercado de crédito a corto plazo, donde los bancos se prestan fondos entre sí, varias veces se ha congelado en la crisis que empezó hace un año debido a las crecientes preocupaciones acerca de la solvencia de los deudores.

La última medida sigue a una serie de fuertes altibajos en los mercados financieros, golpeados por los temores de más cimbronazos en Wall Street después de que Lehman Brothers declaró la quiebra, Merrill Lynch perdió su independencia, la aseguradora AIG fue salvada con un rescate de 85.000 millones de dólares y Morgan Stanley y Goldman Sachs dejaron de operar como bancos de inversión.

El BCE y el Banco de Inglaterra ofrecieron hasta 40.000 millones de dólares en fondos en moneda estadounidense a un día cada uno.

Esa provisión de dinero siguió a una inyección que hizo el BJ por 1,5 billones de yenes (14.200 millones de dólares) y a otra del Banco de la Reserva de Australia por 815 millones de dólares australianos (680 millones de dólares estadounidenses).

Como parte de una iniciativa de los bancos centrales de todo el mundo para responder a la escasez de dólares, el banco central japonés también ofreció 30.000 millones de dólares en fondos a un mes para aliviar la estrechez en el mercado de dinero.

Las tasas de interés a un día en dólares se mantuvieron estables entre 2,5 por ciento y 3,5 por ciento el miércoles en Asia, con negocios limitados, tras los anuncios de los bancos centrales.

"Entiendo que todos están reduciendo la actividad, el mercado sigue nervioso", dijo un operador en Singapur.

Las tasas llegaron a dispararse al 10 por ciento la semana pasada. Pero en los niveles de las operaciones de Asia el miércoles, seguían arriba de la meta establecida por la Fed, de 2 por ciento.

El martes, el BCE ofreció a los bancos liquidez por 65.000 millones de dólares, el Banco Nacional de Suiza ofreció 18.000 millones de dólares y la propia Fed agregó 20.000 millones de dólares, calmando las tasas interbancarias.

Sin embargo, el crédito entre los bancos a largo plazo sigue trabado.

Todas estas medidas se conocen en momentos en que el presidente de la Fed Ben Bernanke y el secretario del Tesoro estadounidense Henry Paulson han instado a que el Congreso de Estados Unidos actúe rápidamente para aprobar un rescate financiero por 700.000 millones de dólares.

Ambos funcionarios han advertido que si no se actúa rápido con ese paquete de rescate, la economía podría enfrentar consecuencias graves.

(Reuters)