Home

Noticias

Artículo

Banco de la República presenta informe al Congreso de Colombia

El reporte explica que la JDBR ha aumentado su tasa de interés de intervención entre abril de 2006 y junlio de 2007 en 13 oportunidades, cada una en 25 puntos básicos, para una tasa de interés actual de 9,25%.

3 de agosto de 2007

Bogotá_ El Banco de la República presentó al Congreso colombiano su reporte al Congreso sobre el comportamiento de la economía del país en los primeros cuatro meses del año. En él explica que la inflación adquirió una dinámica creciente al pasar de 4,5% en diciembre a 6,3% en abril, superando la meta fijada por el Banco para todo el año para 2007 (3,5%- 4,5%).

“En mayo y junio se observó una disminución en la variación anual de los precios al consumidor, a 6%. El repunte de la inflación obedeció en parte a choques de oferta, que presionaron al alza el precio de los alimentos, cuya inflación anual a junio alcanzó el 9,7%. Entre los factores que explican este comportamiento, cabe mencionar el fenómeno de El Niño, el alza en los precios internacionales de productos básicos que son insumos para la fabricación de biocombustibles y la fuerte demanda de Venezuela, particularmente de carne. Por su parte, el fuerte incremento de la demanda interna (11%), ha añadido una presión importante sobre los precios de distintos rubros de la canasta familiar además de los alimentos”, señala el Emisor en su reporte.

El Banco explica que “el crecimiento durante el primer trimestre del 2007, desde el punto de vista de la oferta, tuvo origen en numerosos sectores económicos, principalmente la construcción, la industria, el comercio y el sector de transporte y comunicaciones. Desde el punto de vista de la demanda, los componentes que más contribuyeron fueron la inversión y el consumo de los hogares. Por su parte, el consumo público disminuyó, acorde con las metas de déficit consolidado para el presente año. Estas características del crecimiento permiten ser optimistas sobre su continuidad, dada la amplia base productiva en la que se origina y el incremento del producto potencial de la economía”.

“En vista de los excesos de la demanda agregada y de la probabilidad de que pudiera agudizar las presiones inflacionarias, la Junta Directiva del Banco de la República (JDBR) ha venido aumentando sus tasas de interés de intervención entre abril de 2006 y julio de 2007 en trece oportunidades, en 25 puntos base cada una. Con el último incremento el pasado 27 de julio, la tasa base para las subastas de expansión se ubica en 9,25%. Esta política restrictiva contribuye al cumplimiento de la meta de inflación en 2007 y a su convergencia hacia la meta de largo plazo definida como un rango entre 2% y 4%. La operación de dichos mecanismos ha sido lenta, en parte como resultado de un crecimiento muy acelerado del crédito bancario, asociado con la recomposición del portafolio de los bancos desde inversiones en TES hacia cartera. En vista de esta situación y con el objeto de acelerar la transmisión de la política monetaria hacia el crédito y la demanda agregada, la JDBR estableció encajes marginales sobre los depósitos de las entidades financieras”, agrega el reporte.

“Este ambiente económico favorable, de rápido crecimiento y reducción de la inflación, ha estado acompañado por una progresiva apreciación del peso. Esto ha sido en parte resultado de la mayor confianza de los empresarios extranjeros y nacionales para invertir en el país. Igualmente está asociado con los elevados precios de los principales bienes de exportación, con los desequilibrios de la economía estadounidense y la excesiva liquidez en los mercados internacionales. Para moderar la tendencia a la apreciación, el Banco realizó entre enero y abril de 2007 intervenciones esterilizadas en el mercado cambiario. Puesto que la JDBR consideró necesario aumentar las tasas de interés durante esos meses para asegurar el objetivo de inflación, se debilitó la efectividad de la intervención cambiaria esterilizada. Así, a partir de mayo cesó la intervención discrecional, y en la actualidad sólo opera la intervención a través de opciones para el control de la volatilidad. A comienzos de mayo de 2007 la JDBR decidió establecer un depósito no remunerado en pesos por un periodo de seis meses, equivalente al 40 por ciento de los desembolsos de crédito externo. Posteriormente, el Gobierno extendió esta medida para los capitales de portafolio. Estas medidas ya comienzan a ser útiles para desincentivar la entrada de capitales de corto plazo, y con ello moderar las presiones a la apreciación del peso. Igualmente, complementan a los encajes marginales y a las alzas de las tasas de interés en el empeño por moderar el crecimiento del gasto agregado”.

“Para lograr un crecimiento sostenible, es indispensable reducir los riesgos internos que pueden derivarse de una excesiva expansión de la demanda frente a la capacidad productiva de la economía. De no enfrentarse oportunamente, podrían surgir presiones inflacionarias y un déficit de la cuenta corriente que podría tornarse insostenible. El incremento de las tasas de interés ayuda a controlar esta situación al moderar el ritmo del crecimiento del gasto. Con este mismo propósito se requiere de una política de austeridad fiscal, que acompañe de forma coherente la política monetaria de tal forma que contribuya a la estabilidad del crecimiento económico y a la reducción de las presiones hacia la apreciación del peso”.

“En el frente externo, las exportaciones continúan creciendo a un ritmo saludable, superior al 9% en términos reales, al tiempo que las importaciones muestran un fuerte aumento, como reflejo de una economía pujante que requiere importar bienes de capital y materias primas para mejorar su competitividad y continuar su expansión”.

“Con respecto a la situación financiera del Banco, las utilidades del primer semestre de 2007 fueron por $371,9 mm, producto de ingresos por $1.207,0 mm y egresos de $835,1 mm. Comparado con igual periodo del año anterior, las utilidades fueron menores en 41,8% ($267,4 mm). Los ingresos disminuyeron en 7,2%, producto principalmente de la apreciación del peso con respecto al dólar, ocasionando un menor ingreso de las reservas internacionales expresado en pesos y a una menor valorización originada en las apreciaciones del euro y el yen frente al dólar. Para el presente año se proyectan utilidades por $997 mm, inferiores en $626,8 mm a las observadas en el año 2006, como resultado de ingresos de $2.568 mm y egresos de $1.571 mm y a las inicialmente previstas en el Informe al Congreso de marzo de 2007 ($1.288 mm)”, finaliza el informe.