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Acciones y moneda Brasil caen ante pesimismo por economía global

2 de marzo de 2009

(SAO PAULO)  Las acciones de Brasil y la moneda de Brasil se desplomaban el lunes en medio de una ola vendedora desatada por los temores a una profundización de la recesión global, luego de que la aseguradora estadounidense AIG reportó una pérdida trimestral récord.

El índice Bovespa de la bolsa de Sao Paulo, la mayor de América Latina, se desplomaba un 4,35 % a media sesión, a 36.523 puntos, frente a los 38.183,31 puntos del viernes.

La tendencia altamente negativa seguía la de los mercados externos, luego de que American Internacional Group (AIG) anunció una pérdida de casi US$ 61.700 millones en el cuarto trimestre.

El Tesoro y la Reserva Federal de Estados Unidos dijeron que la firma recibira hasta US$30.000 millones más en fondos como parte de los intentos de rescate del Gobierno.

En la bolsa paulista, el retroceso era liderado por acciones de empresas vinculadas a las materias primas y del sector financiero.

"Las noticias del sector financiero y de la economía estadounidense hicieron comenzar la semana bastante pesada en los mercados internacionales", dijo Nicolas Barbarisi, director de operaciones de la correduría Hera Investments.

Las acciones de la gigante minera Vale, la mayor productora de mineral de hierro del mundo, se desplomaban un 4,66 %, a 25,58 reales.

En tanto, los títulos de la petrolera estatal Petrobras perdían un 3,94 %, a 25,36 reales, en momentos en que el barril del petróleo retrocedía más de un 9 %.


Los papeles de la siderúrgica Gerdau caían un 5,06, los de la Companhia Siderúrgica Nacional (CSN) un 5,61, y los de Usiminas un 5,13 %.

En el sector financiero, los papeles del banco Itaú perdían un 5,09 % y los de Unibanco un 4,53%.

Real cae

En tanto, el real se depreciaba un 2,38% en el mercado interbancario, a 2,427/2,429 unidades por dólar, frente a los 2,369/2,371 al cierre del viernes, cuando retrocedió un 1,11%.

El dólar avanzaba un 0,83% ante una canasta de monedas principales, porque los inversores buscaban un refugio ante el sombrío panorama económico global.

 

 

(REUTERS)