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Un camboyano con el prototipo de la lámpara MoonLight.

Luz para los pobres

Una lámpara de energía solar le permitió a la colombiana de 28 años, Ana María Álvarez, ganar el premio más destacado de diseño en Holanda.

21 de enero de 2009

Una lámpara que opera con energía solar es el diseño con el que una colombiana de 28 años, Ana María Álvarez, ganó uno de los Dutch Design Awards, el premio más destacado de diseño en Holanda.

Cada año un grupo de organizaciones como la ciudad de Eindhoven, la Association of Dutch Designers, y Design Connection Brainport y de patrocinadores como Audi, Rado, 3M y el National Committee for International Cooperation and Sustainable Development, NCDO, escogen los trabajos más destacados de los diseñadores de los Países Bajos. “Los premios simbolizan el reconocimiento al mejor y más reciente trabajo que se puede encontrar en Holanda”, explica Ana María Álvarez.

Dentro del concurso, el NCDO otorga el premio Toon van Tuijl, que destaca los diseños que contribuyen con el desarrollo económico y social de países pobres. Este fue específicamente el que ganó la colombiana en equipo con la diseñadora holandesa Doortje van de Wouw, el ingeniero griego Loucas Papantoniou y la también diseñadora alemana Stephanie Wirth. El grupo se llevó 2.500 euros.

El dinero del premio lo usará la firma Kamworks, donde trabajan los cuatro galardonados, para financiar el desarrollo final de la lámpara MoonLight, que debería estar en el mercado en 2011.

La disputa por el premio no era sencilla. El grupo de Kamworks compitió por el primer puesto contra Philips Design, el departamento de diseño de la gigante empresa holandesa de productos eléctricos.

El éxito del equipo de Kamworks, una firma de socios holandeses que viven y trabajan en Camboya, está en que solucionan un problema relevante para muchas familias pobres. “La lámpara esta dirigida a la gente de las zonas rurales de Camboya que no tienen acceso a la red eléctrica y que como sustituto utilizan baterías de carro o lámparas de kerosene, que son soluciones que toman tiempo, son peligrosas y a la larga costosas”, explica Ana María Álvarez. “En el momento en este país, el 90% de la población no tiene acceso a la red eléctrica”, añade.

La MoonLight se carga con paneles solares, es portátil y costara cuando esté en venta, alrededor de US$15. “Como este producto hay muchos en China pero son de muy mala calidad. Nuestra lámpara fue prácticamente diseñada con la gente que la va a usar, los campesinos de Camboya”. Los cuatro estudiantes de maestría de la universidad TU Delft, estuvieron en Camboya entre abril y junio.

Los US$15 son una inversión grande para los camboyanos, “pero la diferencia la ven a largo plazo porque no tiene costos de operación. También la forma de la lámpara ayuda”, dice. El aparato tiene correas que permite colgarla del cuello y eso da libertad para usar las dos manos.

La innovación también tiene sentido para la firma ganadora. “El negocio principal de la empresa es la distribución e instalación de paneles solares, pero estos son muy costoso y grandes para la gente del común, así que la empresa esta intentando sacar al mercado una línea de productos de bajo costo dirigida a la gente de las zonas rurales”, señala.

La alianza con jóvenes universitarios también tiene mucho sentido para Kamworks. “La empresa es pequeña y se vale mucho de estudiantes como nosotros para sacar nuevas propuestas y diseños. Somos su departamento de investigación y desarrollo”, dice Ana María.

Lo que sigue
Ana María Álvarez es diseñadora industrial de la Universidad de los Andes. Trabajó dos años en Colombia y decidió ir a Holanda a hacer sus estudios de maestría en Diseño estratégico de productos.

“Ahora estoy en Philips haciendo mi tesis de grado. Acabo en cuatro meses y me quiero quedar en Holanda. Quiero seguir relacionada con temas de sostenibilidad y aquí hacen mucho por ese lado”, señala.

Y ¿qué hace alguien que sabe de estrategia y diseño? “Nosotros nos encargamos del principio y del final del proceso. Antes de ir a Camboya hicimos todo el análisis de la empresa y del país, el análisis de mercado, cuando llegamos a Camboya diseñamos las entrevistas y los métodos que íbamos a usar para acercarnos a los consumidores. El estudio de usuario y del mercado”, explica la diseñadora colombiana. “Y al final, como presentarla al público, el diseño del manual, publicidad, etc”, concluye.